Julieta

Julieta me escribe su nombre en tantas madrugadas, violentas, desesperadas,
No sabe pedir perdón, y ni siquiera lo intenta.
Sus ansiedades la obligan a sujetar mis manos, pero cuando amanece,
Ya no es la misma, y odia todo lo que tenga que ver conmigo.

Julieta tiene pesadillas aunque ella, ella no sabe muy bien cómo dormir,
Se escapa siempre, se ríe de ser feliz.
No le gusta el café, le gusta el whisky y fuma mucho más que yo,
Pero cuando amanece dice : ''No lo haré otra vez, amor''

Va a caer hacía abajo por las escaleras, va a saltar por el balcón,
Julieta se escribe cómo desolación.
Va a desarmar mi rompecabezas, va a romperme el corazón,
Julieta a veces, no se parece,
A Julieta. 

Julieta escribe canciones con su maquina de escribir,
Rotas de ilusiones, remendadas a decepciones,
Pero todas para mí.

Otra Pieza del Rompecabezas

Mi Actriz

Me enamoré de una actriz, de corazón frágil, y ojos verdes. Yo la escuchaba llorar de noche. Fueron tantas noches. !Pero cómo la quería! Tanto la quise, que la amé. Tanto la amaba, que no pude hacer otra cosa más que lastimarla. Que tonto fui. No pude ayudarla, no supe cómo. Quería abrazarla muy fuerte para que pasen todas sus pesadillas, es que, eran tantas. Yo me enamoré de una actriz, de ojos verdes y labios dulces. Tenías las manos chiquitas. 
Ella me decía siempre la verdad, no teníamos nada que ocultar. Estábamos solos entonces, y sucedió. Se escondió en el baño la primera vez. Era una tarde de invierno, el sol estaba contento. Ella era tan frágil entonces, y lo sigue siendo ahora. Pero cómo se reía, cuando se reía. Me curaba los terrores de un beso en la mejilla, no se podía más. Ella sabe por qué.
A veces, me hacía acordar a Buenos Aires. Era tan linda, pero tan triste. Tan llena de gente, y tan sola. A veces, me dolía su nombre. A veces, duele. Pero me abrazaba los miedos en esas noches, y yo los suyos. Se nos hacía tarde de vez en cuando. Más cuando queríamos estar a tiempo.
Y una tarde, la decepcioné por última vez. No volví a saber de mi actriz favorita, de mis obras favoritas. De esas tragicomedias, las nuestras. Pero cada tanto, la quiero. 

El Último Día : Los Agujeros

Día 15 .

Caminé la calle deshabitada. No crecieron más árboles, más flores ni jardines. Todo estaba ya utilizado. Todo ya fue destruido. Desde aquel día, nada volvió a ser lo mismo. Fue ese día, trágico día, que todo convulsionó, todo se derrumbó para siempre. Desde ese día, ya no respiramos. No podemos tocar nuestras manos. Estamos prohibidos. Han dicho en los televisores que ya pasará. Doctores y políticos, dieron su testimonio. Tenemos que utilizar éstas mascaras hasta que todo pase. Hasta que ya no queden recuerdos de lo que pasó ese día.

Sobre los restos de lo que una vez fue un Fiat azul, habló mientras escondía detrás de sí, a una mujer. Poco a poco, nos fuimos reuniendo.Nosotros los desafortunados sobrevivientes. Dijo que todo había sido planeado por los mismos que había desatado la tercer guerra, y las plagas del sur. Entonces, la mujer antes escondida, pasó a protagonizar el testimonio del hombre. La desnudó frente a nosotros. Horrorizados vimos, los agujeros que se abrían en su cuerpo. No sangraba. Simplemente eran agujeros que dejaban ver del otro lado, el paisaje seco y muerto, muerto para siempre en vida. ''Ésto es lo que les sucedera a todos ! Ustedes también tendrán sus agujeros ! Pues todos están envenenados! Estaba en el agua, en el aire, en la comida ! Todos somos muertos ahora ! Oh ! Dios está muerto y lleno de agujeros , cómo pronto estaremos nosotros !'' Temí. Me alejé lo más rápido que pude. El cielo no fue nunca más azul desde aquella tarde. Cuando todo sucedió . 
No soportaba mi mascara, sentía nauseas. ¿Sería verdad aquello? Busqué en mí, y no encontré agujeros. ''No todavía'' - pensé. 

Hace más de diez días no comía. Nadie lo hacía. No se nos permitía más que ver los televisores enormes que pendían desde el cielo, hasta que llegasen las máquinas el próximo mes. Las maquinas que haría nacer las flores y nos darían el alma de vuelta al cuerpo, llegaría pronto.

De pronto escuché. Los gritos horrorizados de un anciano, rompían el silencio del atardecer sin ocaso. ''Era verdad'' ''Por dios, era cierto''. Lloraba, y se retorcía en el suelo. Estaban empezando a crecer agujeros en sus manos, y en sus pies. Agujeros creciendo. Era un dolor inmenso, más grande que la muerte. Nadie más acudió a sus llamados, estban todos mirando los televisores que pendían desde el cielo.

La vida en éste planeta

¿Estás comprando lo suficiente? ¿Cómo podes ser feliz si no compras lo suficiente? ¿No ves? Todavía no tenes suficiente. Más, compra más. Uno a uno, formen fila, ¿Todos tienen ya suficiente? No, vos todavía no tenes suficiente. ¿Viste lo que compró la señora de gris? ¿No ves lo feliz que luce ahora? No más incovenientes. Pasillo 3 a la izquierda. Felicidad para todos. A precios inmejorables. Compra tu felicidad, no desperdicies tu tiempo. Tiempo es dinero. Dinero es felicidad. ¿Sonrisas? Pasillo 4. Ofertas increíbles. ¿Sabes que te hace falta a vos? Comprar un poquito más. Pasillo 5 a la derecha, encontrarás de oferta, llevando dos ilusiones pagas solamente una. ¿Te lo vas a perder? No te lo pierdas. Si te lo perdes, ¿Con quién vas a hablar? Todos van a estar hablando de ésto y no vas a poder hablar con nadie. Por lo tanto te vas  a quedar solo. No te quedes solo. No te va a gustar estar solo. No se puede hablar con nadie cuando estás solo. No se puede ser feliz. Tenes que comprar ésto. Antes que te vayas! No te olvides de éstas novedades! Todas preparadas para cubrir tus agujeros! No te preocupes, tenemos curitas de todos los tamaños. ¿Duele mucho? No importa. El dolor no existe, todo es utilizable. ¿Estás comprando lo suficiente? No! Todavía falta una cosa más! ¿Qué ropa tenes puesta? Necesitas un cambio de imagen. ¿No ves? Esos chicos parecen tan felices con sus ropas, están rodeados de más y más gentes, y todos parecen tan felices. Compra ésto, es para vos, te queda hermoso. Más, compra más. La distracción es una bendición, amigos, una bendición. ¿Quieren ser aburridos e infelices? Si ! Cómo esos que no compran ! No, tienen que brillar! ustedes si que son estrellas ! Que hermosos se ven comprando, compren más! más ! más ! La libertad tiene un precio ! Todo es negociable, amores! El mundo nunca cierra sus puertas a sus compradores ! Diganselo a todos ! La ciudad está de fiesta con las nuevas rebajas ! Atención! Atención! Aten...

Desperté empapado en sudor. Había sido todo un sueño. Un mal sueño. 

Me vestí y salí corriendo al supermercado.

Cancion 37

Están repletos de espacios vacíos.

Están diciéndome lo mismo,

Están creyéndolo, están amándolo, 

Están dándole un significado. 

Soy parte de la multitud,

Yo tampoco soy feliz.

Estoy abismo, estoy vacío,

Estoy despierto, estoy dormido,

Estoy vos, estoy nosotros,

Estoy alejándome de todos. 

Soy otra habitación de tu edificio,

Yo tampoco me quiero a mi mismo.

Estás pero no estás,

Aunque estés,

Nunca estás.

Las Cartas

Buenos aires, 3 de septiembre. De noche, como siempre.

Te escribo, otra vez. Aunque ya sé, no vas a escribirme. No sé por qué continuo con ésto. Quizás me mantiene vivo la esperanza de que simplemente no hayas leído ninguna de las otras cartas. Es tarde ahora. Es tarde siempre. Desde que te fuiste, o mejor dicho, desde que me quedé. No pasó ni un momento, ni siquiera uno. Están todos detenidos en la puerta de entrada. Y el cenizero que llenaste con las colillas de tus cigarrillos quedo exactamente en la misma posición. Lleno. Y el cuarto, tal y cómo lo dejaste, todo desordenado de tan ordenado y limpio que está. Todo le falta, pues no tiene habitantes. Lees bien, yo no habito, ni soy, ni existo. Ni río, ni hablo, ni amo, ni soy, ni existo, ni entiendo. El cajón, en su perfecto estado, celosamente esconde los restos de marihuana que olvidaste. Los papeles de armar, dentro del libro de Rimbaud que no te llevaste. No sé por qué. Me quedé sentado en el sillón, dónde apague el último cigarrillo desde que te fuiste, mejor dicho, desde que me quedé. Te espero siempre. 

El pasado llegará mañana

El pasado nos encontrará mañana,

Leyendo en el periódico, por la mañana,

En un domingo tan arrugado.

Pero si podemos encontrarnos antes,

Podríamos cambiarlo todo.

Y nunca volvería a ser lo mismo,

Después de todo lo que vivimos, 

Podríamos tenerlo todo,

Y no necesitar más nada.

Estoy esperando a que vengas,

y alejes mi mente de esos pensamientos,

que me acechan, y al mismo tiempo,

los necesito para continuar despierto.

Por favor, estoy esperando ese sentimiento.   

El pasado llegará mañana,

mañana, mañana, mañana.

Estás Esplendida

Soledad, ésta noche, estás esplendida,

Vestida de noche, para mis noches.

¿Me conoces mejor que ella?

¿Me conoces mejor que él?

El tiempo que nos queda,

¿Me ayudas a creer?

Soledad, ésta noche, estás esplendida,

Perdida entre la gente, cómo extranjera,

Yo sé que vos bailas con todos.

Pero ¿No ves? Ellos no te quieren,

No cómo yo te adoro, Soledad.

Ellos no entienden. No te entienden.

Podes acostarte con todos,

Pero yo sé, soñas conmigo nada más.

Y así, yo te espero siempre, 

Mi Soledad. 

Pétalos cayendo

Las rosas del jardín,

No volverán a crecer.

No escucharé tus pasos,

El sonido de tu voz,

Poco a poco,

Será solamente un eco,

Que, en el silencio,

Recordaré.

El tiempo de las primaveras,

Ya no vendrá.

No conoceremos más,

Los veranos del amor.

Tendremos que guardar,

En nuestro cajón,

Lo que no trajimos,

Ni podremos llevar.

Tus lágrimas, cómo pétalos,
cayendo para siempre.
Tus manos, sueltan las mías,
Siempre duelen las despedidas.

Los días nublados

Quizás no tenga tiempo, un domingo por la mañana, para decir cómo me siento. Yo sé por qué. Vos dijiste que ibas a volver, pero si yo no te hubiese escuchado nada de ésto hubiese pasado. Lo sabemos los dos. Quizás estés en lo cierto, yo simplemente no entiendo la vida. Pero la intento. Lo mejor que puedo. Y es simplemente eso, lo que puedo, cómo puedo y hasta dónde puedo. 

¿Y si te digo que no te vayas?¿Te quedas? Vos sabes, a veces yo no sé, ni siquiera mi nombre. Éstos días nublados. ¿No te parecen hermosos? Cómo la tristeza. Cómo la desilusión. Cómo el dolor más profundo que es la vida, no la muerte. ¿Y? ¿Te quedas o no?

Canto La, la, la mientras miro la ciudad dormida en mi balcón . 

Lo que sé, es lo que realmente ignoro.

Yo digo.



Ya sé. No digas nada. No hace falta. No abras esa puerta. No dejes entrar esos fantasmas. Buenos aires está triste, de noche, se ríe pero a la mañana, vuelve a llorar. 
Ya sé. No esperes nada. No creas nada. No digas la verdad, pero no me mientas. Escóndete, por favor. No quiero lastimar esa parte de vos que no me lastimó. 
Ya sé. No tengo nada. No soy nadie. No tengo algo que pueda darte. No sé que podría decir que ya no hayas escuchado. 
Ya ves. Lo que digo, no es lo que hago. No es lo que hago, si no por qué lo hago. Porque no hago lo que tengo que hacer. No creo que puedas entenderlo. 
No me asusta la muerte. Me asusta más la vida. 

De mí

Y así, tan destructivo. No lastimo a nadie, a nadie más que a mí. 

No soporto esa parte de mí, que no tiene nada que ver conmigo,

y sin embargo, se lleva todos los aplausos. 

Soy un error, por el que pedirán perdón más tarde.

Un inconveniente. Una separación constante.

De mí, conmigo, sin mí y sin nadie.

Y así, tan vacío. Te agarré, lo más fuerte que pude,

para que nunca puedas soltarte, y dejarme solo,

porque yo te necesito para vivir ahora.

Y así, te asesino cada tanto, cada vez que entiendo,

que no sos más que un sueño, o quizás, en el mejor o peor de los casos,

un recuerdo, que jamás sucedió, que reprimí, que escondí,

abajo de la alfombra, cómo me enseñó papá.

Una historia así, no tiene finales felices disponibles,

para mí, para vos, para nadie.

¿No ves? No tengo ni idea de cómo hacer las cosas,

Todo lo que necesito, es lo que me mata.

Pero mi amor, ¿No entendes? 

La belleza del amor, es lo obsesivo y destructivo que puede ser,

no sin antes darte un beso de buenas noches.

Si estás al borde del precipicio, salta.

¿Qué vas a hacer?

Todos quieren un buen espectáculo,

El público es impaciente.

Salta, salta.

Robales todos los aplausos.

...

Me olvidé tu nombre en una canción.

Cancion 1

¿Qué estás diciendo?

No te puedo entender.

¿Qué estoy diciendo?

Conozco las palabras

pero no sé por qué.

¿Estaré muy lejos?

Demasiado para volver.

Cada vez que intento,

Me pierdo más cada vez,

Duele más,

cada vez.

Y puede ser, 

que cumpla las promesas,

que hice alguna vez.

Algún día, te encontraré. 

Las Noches Sin Dormir

Te esperé.
Llegó la tempestad,
Deje que pasara.
Es mi culpa.

Te creí,
Hice que llegará,
No es lo mismo,
nunca más.

Yo tengo un mañana,
que pasó ayer.

Escritos en papeles encontrados en el suelo # 7

Tuve que irme, hablamos . Te amo . 

Harina

Leche

Pan

Huevos

Esencia de Vainilla

Re                  Sol   - Re / Fa # - Mi m - Do

   Un Día Maravilloso

No sé dónde olvidé mi nombre,

Estaba despierto cuando te soñé.

El lunes tenemos que ir al medico, no te olvides por favor. 

Salta, yo te agarro

http://es.123rf.com/photo_208426_campo-de-trigo-en-blanco-y-negro.html

Una última palabra,

Para quedarme así, detenido,

Adormecido para siempre.

No extiendas tu mano,

¿Qué sentido tiene?

¿No te parece que todo ésto

es un poco absurdo, mi amor?

Estuve en la sombra de las mariposas,

Cuando entendí que no llegaría,

Jamás la primavera.

Invierno constante.

Salta, yo te agarro. 

Otro rostro en la multitud

(Calle Corrientes - 4 Pm - Día Nublado #3)

Estás muerta. 

En mis manos, y en mis ojos.

No te conozco más,

No te reconozco más 

Que en mi pasado.

Ahora, cuando te veo,

Simplemente,

Veo otro rostro en la multitud. 

Estás muerto.

En mis pensamientos,

No tengo ya el sentido

De tu tacto, he dejado,

Atrás tu nombre.

Estoy muerto.

En tus palabras, en tus poesías,

En tus sueños, en tus labios,

Muerto, una vez,

Muerto para siempre.

Éstas palabras ya fueron escritas

¿Acaso tus ojos estaban cerrados antes que yo los mirara? ¿Acaso tus palabras ya estaban dichas? ¿Será, entonces, que tus manos ya me habían soltado antes de que las sujetara? ¿Sujetar es lo mismo que aferrarse? ¿Creer es convencerse? ¿Convencerse es mentirse? ¿Mentirse es creer? ¿Creer es Amar? ¿Amar  es, entonces, mentirse a uno mismo? 
¿Estaban tus renglones ya escritos? ¿Estaban tus cartas entregadas? ¿Y tus mañanas? ¿Ya estaban todas despiertas? ¿Dónde te encuentro ahora que no sé buscarte? ¿En qué página de mis libros olvidé tu nombre? ¿Tengo tiempo todavía? ¿Habrá tiempo todavía? ¿Éstas palabras ya fueron escritas?

Abismos

Julieta no es como otra chica. 
Nadie más puede hacerme sentir cómo ella. 
Esas noches violentas.
Quise dejarte, una vez y otra,
pero siempre regresaré sobre mis pasos,
Siempre te estoy buscando.
A veces, te necesito, 
más de lo que te quiero.
Julieta se ríe. Se lastima. Llora.
Se termina. Suspira.
Amo sus abismos.
Amo sus precipicios. 

Pensamientos Desordenados # 1

Renglones.

La hoja está en blanco.

El blanco está en la hoja, dispara.

El disparo hirió la hoja.

Ahora, es poesía.

Julieta le dice a Julieta:
''No puedo más''

El Amor Inalcanzable

Estiré mis manos. No te alcancé. Te me fuiste, como siempre. Me desperté y no estabas. Ya no estabas.




Las noches no son las mismas. Son peores.



¿Cómo hago para que no me duela? 
¿Tenes curitas?

Primero de Enero

Nada vuelve a ser lo mismo, y menos mal. Cómo cambia la vida a cada rato, ¿No? Eramos otros hace un rato y ahora somos otros. Cómo nos pega la vida, también nos da un beso en la boca, bien profundo y dulce. Besos que faltan. Abrazos que extraño. Tardes que fueron. Recuerdos que son. Nada permanece. A su tiempo, todo llega. A su tiempo, todo termina. Nombres que amo. Nombres que duelen. La violencia. La muerte llega, como llega la vida. Los etcéteras. Las calles que camino. ¿Ahora dormís de noche? Antes no dormías, te acordas, ¿No? Nena, el amor es noche, cama, vino, locura, depresión, consecuencia, soledad, abismos y besos, besos, besos. Pero nada vuelve a ser lo mismo, ni las calles, ni las manos, ni las horas, ni los días. Cambia hasta el sol con cada despedida. Las noches no son las mismas, son peores. Más locas. Los nombres no cambian, pero duelen más o menos. Cómo nos cambia la vida.