La quietud de un cajón vacío, de un libro cerrado,
El silencio de una habitación, detenida en el tiempo.
La tristeza de las horas, desarmándose todas,
En pequeñas piezas, irreconciliables.
Lo lamento, no puedo continuar de ésta manera.
Es tan tarde ahora, para preguntar:''¿Por qué?''
Lo dije mal, pero creo que lo entendiste bien,
No quise lastimarte, pero me lastimé.
Traté de cerrar los ojos frente al espejo,
Supe la verdad, pero no quise verlo.
Me convertí en una sombra del pasado,
La angustia de un simple reflejo.
Sentí caer las lágrimas, golpeando el suelo,
Dejando que todo caiga, lo lamento.
Lo dije, lo creo. No puedo empezar de nuevo,
Las cosas cambiaron demasiado para mí.
Las cosas cambiaron demasiado para mí.